Préstamos entre particulares

El préstamo entre particulares es una de las formas de obtener financiación más rápidas que existen, aunque no es la más popular ni conocida. Hablamos de una forma de llegar a disponer dinero sin tener que acudir a las oficinas bancarias, ya que en este caso los acuerdos se gestionarán entre dos particulares.

Para algunos inversores, la tramitación de este tipo de créditos son realmente interesantes, ya que el capital que precisan procede de fondos de amigos o familia, lo que implica una reducción considerable en gastos de gestión, comisiones y cualquier otro tipo de interés que normalmente sí incluye el préstamo convencional.

Aunque se preservan muchos derechos como prestatario y prestamista, no hay que olvidar que este tipo de contrato de préstamo no estará regulado por el Banco de España, lo que implica tener que aumentar las precauciones ante una mayor exposición a posibles riesgos, como la imposibilidad de recuperar el dinero una vez prestado.

Para poder garantizar la seguridad de la operación y contar con una garantía, es muy recomendable crear una escritura pública, por ejemplo. Un documento que permita recoger todas las condiciones del préstamo y asegurar así su correcto funcionamiento, determinando la obligación y derechos de cada parte implicada.

Ventajas del préstamo entre particulares

Por delante de éstos encontraremos muchos otros tipos de créditos en el mercado. Al no depender de la banca, carecen de publicidad ni medios para estar en los principales catálogos. Sin embargo, cada vez son más los que apuestan por esta forma de financiación.

No es para menos, hablamos de poder disfrutar de una serie de ventajas que ninguna otra forma de financiación garantiza, con beneficios y facilidades que los convierten en una poderosa herramienta con la que obtener ese capital que tanta falta hace.

Cualquier proceso que llevemos a cabo en las diferentes entidades de crédito precisa de un tiempo para reunir la información, enviarla y esperar a que sea estudiada. Y, aunque actualmente estos plazos se reducen al máximo, en este caso no tendremos que pasar por ninguna de estas fases.

Tan solo bastará con contar con el visto bueno del prestamista que nos cede el capital, firmar el contrato de préstamo y esperar a recibir la transferencia en el acto. Normalmente, todas estas acciones se realizan en el mismo momento y apenas requieren de unos minutos. Sin importar si el dinero va destinado al negocio, al pago de la comunidad o cualquier otro concepto.

Obligaciones de los préstamos entre particulares

Aunque muchos creen que simplemente se trata de una gestión y cesión de dinero entre dos conocidos, los créditos entre particulares requieren de una serie de obligaciones para ser llevados a cabo, como por ejemplo:

• Se hace imprescindible elaborar un contrato de préstamo. Puedes descargar diversos modelos de ejemplo desde multitud de plataformas.
• En él debes incluir todas las condiciones y términos que comprenden esta acción, desde plazos de devolución hasta el tipo de interés aplicado.
• Como parte que recibe el dinero, tendrás que comprometerte a devolverlo en el tiempo indicado.
• Puedes aportar una garantía de pago ya que, en el caso de imposibilidad por afrontar la devolución, el prestamista pueda ejecutar esa cláusula y obtener su capital prestado igualmente.
• Tendrás que rellenar el modelo 600 en Hacienda e informar de tu nuevo contrato de préstamo. Este es un tema fundamental y necesario de llevar a la práctica.

Además, la normativa incluye que sea la parte que recibe el dinero quién deba iniciar la autoliquidación para pagar el impuesto correspondiente, por lo que es fundamental cumplimentar el formulario y aportar todos los documentos necesarios, aunque los acuerdos y otorgamiento sean con familiares.

¿Cómo elaborar un contrato de préstamo entre particulares?

Dada la conveniencia de formalizar las condiciones del préstamo a través de un contrato entre ambas partes, veremos cómo elaborarlo y qué datos incluir en él. Además, conviene tener lista toda la documentación relacionada porque habrá que presentarla en la Agencia Tributaria junto con el modelo 600.

Este contrato puede ser elaborado por uno mismo, aunque siempre se recomienda acudir a un notario de primer nivel que pueda verificar la operación. Sin embargo, esto encarecerá notablemente su coste. Sea como fuere, asegúrate de incluir lo siguiente:

• Datos del prestamista. Nombre, DNI y dirección de la persona que proporciona el capital.
• Datos del prestatario. Nombre, DNI y dirección de la persona que recibe el importe en cuestión.
• Capital. La cantidad de dinero que se va a transferir.
• Tipo de interés. Tanto si incluye interés como no, hay que reflejar el porcentaje.
• Otros gastos. Reflejar desde comisiones como cualquier otro gasto derivado que pudiera generar la operación.
• Plazo de devolución. Definir la cantidad de pagos que se deben realizar y su cuantía.

Además, en el mismo contrato también se incluyen otras cláusulas que resuelven dudas y situaciones como el impago, las garantías que se presentan como aval, el protocolo de actuación del prestamista en caso de no recibir el dinero o posibles embargos.

Recomendaciones sobre el préstamos entre particulares

Si quieres saber cómo prestar dinero a un familiar sin tener problemas con Hacienda, a un amigo o eres tú la parte interesada en recibir el dinero, lo mejor que puedes hacer es preparar toda la información posible para que ningún detalle quede sin aclarar.

• Desconfía. Si el prestamista es una persona desconocida de la cuál no tienes referencias ni garantía de confianza.
• Calcula. Determina la cantidad de dinero que necesitas, no abuses de la confianza y contempla posibles opciones.
• Pregunta. Muchos no dan el paso por no preguntar. Si tus familiares pueden ayudarte, que no te quepa duda de que lo harán.
• Asegura. Cuenta con la garantía que proporciona la presentación de un contrato, aunque seáis familiares o amigos, lo mejor que puedes hacer es sellar la operación mediante los contratos.
• Liquidación. Cuentes o no con exención de intereses en el préstamo, asegúrate de devolver el importe que te han prestado.
• Autoliquidación. Como mencionamos anteriormente, necesitas comunicarlo a Hacienda y realizar la autoliquidación pertinente en el pago del impuesto ITP.

Ambas partes tienen derechos y obligaciones que cumplir, de ahí la necesidad por iniciar la constitución de un artículo que termine formalizándose en una escritura pública, un documento que permita incluir todas y cada una de las condiciones por las que se debe regir la futura transferencia de dinero.

FAQ – Préstamos entre particulares